Hoy os vamos a contar un trabajo que ha sido muy especial por varias razones. La primera y fundamental son sus protagonistas, Ramón y Esther, a los que conocemos desde hace ya algunos años. La segunda es la ilusión, alimentada durante años, por celebrar su XXV Aniversario como la boda que en su día no pudieron hacer. La tercera, el amor y la complicidad que en todo momento hemos visto en sus miradas, la misma, o más, que en el primer sí quiero.
La confirmación de los votos tuvo lugar el 19 de diciembre en la capilla del Colegio de la Presentación en Málaga, ¡nuestro colegio! Así que podéis imaginaros la ilusión que nos hizo volver a ese lugar, que por cierto recordábamos más grande, visto por los ojos de dos niñas.
Una ceremonia emotiva en la que participó la familia que han formado en estos 25 años y en la que no faltaron los titulares de su cofradía, la Congregación de Mena, con las imágenes de sus Titulares, el Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Soledad, además de la Niña María.
Después llegó el momento de acudir al Restaurante Romara donde tuvo lugar la celebración, con un montón de detalles en los que tuvo mucho que ver Ainhoa, una gran amiga de los Ramón y Esther, quien preparó detallitos como el precioso seating personalizado: un nazareno hecho por ella misma que en la vela tenía el nombre de la persona que se sentaba. También se encargó de hacer el libro de firmas, un lienzo con el árbol de las huellas que fue la sensación de la fiesta.
Además, preparamos un photocall con el nombre de todos los invitados formando el número 25, como símbolo de que en esos 25 años forman parte fundamental las personas que los acompañan en el camino. Y como no, un detalle que no falla, ¡nuestro carro de chuches!
Esta boda es además muy especial no sólo por todo lo que os hemos contado hasta ahora, sino porque cierra la temporada 2015 que ha sido intensa pero fantástica, que nos ha dejado cansadas pero felices. Ha sido un maravilloso año de trabajo al que esperamos que sigan muchos más.
Como siempre, queremos dar las gracias a todos los que nos han ayudado para que este evento fuera todo un éxito como Catering Lucía con Luchi y Elena y todo su equipo, Alfonso DJ, Floristería La Buganvilla… y por supuesto, a Ramón y Esther. Gracias por confiar en nosotras para ese momento único ¡y a por otros 25 años de felicidad pareja!