A la hora de empezar a preparar una boda, probablemente los ramos de novia no sean unas de las principales cuestiones a tratar. Pero eso tampoco significa que vayamos a restarles importancia. Elegir el ramo de novia perfecto puede llegar a convertirse en uno de los elementos más relevantes el día de la boda porque de su elección depende en gran parte el éxito del vestido y del look nupcial en general.
Al bouquet tradicional se han sumado actualmente otras muchas opciones en función de los gustos y estilos de las novias. Por eso, hoy te traemos 5 tipos de ramos de novia para que te inspires y aciertes en tu elección.
Si quieres darle un toque dulce y romántico a tu look, el ramo de novia de rosas es el perfecto para ti. Pueden ser rosas blancas o de colores empolvados y pasteles como vemos en la imagen. Sea cual sea el tono elegido, parecerás salida de un cuento y mantendrás un estilo clásico. Ante todo, es un ramo de novia muy discreto.
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El mundo nupcial tampoco escapa del estilo boho. Si vas a celebrar una boda al aire libre, rodeados de naturaleza, tu elección más acertada será el ramo silvestre porque te aportará un toque campestre y a la vez desenfadado y natural.
Hay muchas formas de confeccionar un ramo de novia silvestre. Unas de las opciones puede estar conformada por flores blancas como margaritas y paniculata y darle un toque de color con cardos, girasoles y lavanda.
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Hasta el momento hemos hablado de tipos de flores y estilos, pero la forma del ramo es otra cuestión a tener en cuenta. Los ramos de novia asimétricos son ideales para las novias más atrevidas, ya que llamarán la atención de todos. Pero cuidado porque este ramo no lo podrás acompañar de cualquier vestido de novia. Para mantener un equilibrio, tanto el traje como el resto de complementos deben ser simples y sencillos.
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Si quieres alejarte de las clásicas rosas, pero tampoco quieres un llamativo ramo de novia asimétrico, tu tipo de ramo de novia es el de hortensias. Con él, tu look nupcial destacará de manera sutil y además estará lleno de originalidad y dulzura.
Además, es un ramo con el que se puede jugar mucho intercalando las hortensias con rosas de pitiminís, por ejemplo.
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Atención, novia supersticiosa, deja de leer este apartado… o no, porque quizás el día de tu boda es el mejor para dejar de lado las supersticiones. Elige un ramo de rosas amarillas y le darás a tu ‘outfit’ no solo color, sino también un toque muy especial. Además, hay quienes dicen que la flor amarilla es alegría, satisfacción, calidez… De hecho, se suele usar para felicitar nacimientos. Eso sí, para no tentar demasiado a la suerte, no olvides llevar algo nuevo, algo viejo, algo azul y algo prestado.
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Imagina que ya has elegido el ramo de novia perfecto, pero las decisiones no acaban aquí. ¿Sabes ya a quién o quiénes se lo vas a entregar? Sí, hemos escrito ‘quiénes’ porque no tienes que decantarte por una única amiga, puedes elegir varios ramilletes y entregarlos a diferentes invitadas. Esto es solo una idea, pero recuerda que esa tradición dará suerte en el amor a las elegidas y probablemente las acercará al altar.
Si quieres conservar tu ramo de novia, te dejamos un artículo de Zankyou sobre ‘Cómo lograr que tu ramo de novia dure con vida más tiempo’.
Y ahora cuéntanos, ¿qué ramo te ha gustado más?, ¿cuál llevarías en tu boda?